En comunidad, a tirar las redes…

10 de octubre de 2025

En comunidad, a tirar las redes…

Con alegría y esperanza, volvimos a reunirnos en Asamblea Nacional de la CVX en Uruguay. Este año nos convocó el lema “Llamados a ser una comunidad apostólica”, inspirados en el pasaje del Evangelio de San Juan (21, 1-13), de donde tomamos la frase que nos acompañó durante todo el encuentro: “También nosotros vamos contigo.”

Como los discípulos de Jesús, nos encontramos en nuestra “Galilea”: nuestro lugar conocido, cotidiano, donde compartimos la vida y el servicio. También nosotros, reunidos, seguimos intentando comprender lo que el Señor está obrando entre nosotros. Como ellos, quizá no entendemos del todo los signos, pero permanecemos juntos y en movimiento, con el deseo de reconocer al Resucitado que se nos hace presente en medio de la comunidad.

Un encuentro que nos prepara el corazón

Antes de la Asamblea, realizamos el Encuentro Nacional, una oportunidad para mirarnos a los ojos, compartir la vida y escuchar cómo el Espíritu actúa en lo concreto de cada historia. Varias compañeras y compañeros dieron testimonio de cómo viven la dimensión apostólica en su día a día: en la familia, en el trabajo, en el compromiso social, en los pequeños gestos de servicio silencioso. En esas voces, pudimos reconocer la diversidad y la belleza de la acción de Dios en medio de la vida ordinaria.

La Asamblea: discernir como comunidad apostólica

Seguimos aprendiendo a realizar la Asamblea en el nuevo formato que proponen los Estatutos 2020, un camino que nos invita a vivir el discernimiento comunitario de una manera más profunda. Quienes llegamos enviados por nuestras comunidades fuimos llamados a pasar al “modo de Comunidad Nacional”, buscando juntos, en la conversación en el Espíritu, aquello a lo que el Resucitado nos invita en este tiempo y lugar.

Este modo de proceder nos ayuda a escucharnos con igualdad, a dejar que el Espíritu susurre en cada voz, y a descubrir que discernir es para nosotros una experiencia de fe compartida. En ese clima, buscamos reconocer los signos de Dios que se manifiestan en la historia de nuestra CVX, agradeciendo los dones recibidos y abriéndonos a nuevos llamados.

Compartir, profundizar y avanzar

La Asamblea siguió el proceso de los tres verbos que emergieron en la Asamblea Mundial de Buenos Aires (2018): Compartir, Profundizar y Avanzar. 

En el Compartir, dedicamos la primera parte del sábado a traer a la Asamblea la vida de nuestras comunidades: los frutos de la oración, las mociones discernidas, los testimonios del Encuentro Nacional. Fue un tiempo de gratitud, de reconocer —como en el Evangelio— la abundancia de los peces que el Señor nos concede cuando nos atrevemos a echar las redes en su nombre. También el informe del CEN formó parte de este momento de compartir, como expresión del camino recorrido juntos.

Ya en el Profundizar, recibimos con alegría el aporte virtual de Franklin Ibáñez, miembro del ExCo-M, quien nos ayudó a mirar más allá de nuestras fronteras, situándonos en la vida apostólica de la CVX Mundial: sus búsquedas, sus desafíos, su riqueza. Luego, el domingo, profundizamos en la vida apostólica de nuestras comunidades pequeñas y también de la Comunidad Nacional, reconociendo los pasos dados y los anhelos que siguen creciendo.

Con el corazón lleno de todo lo compartido y discernido, pasamos al Avanzar. Volvimos al texto de Juan, y nos sentimos como los discípulos que, al reconocer al Señor en la orilla, no se atreven a preguntar quién es, porque ya lo saben. Desde esa certeza serena, nos hicimos una pregunta común: “Señor, ¿dónde nos invitas a tirar las redes?”

Prioridades para el camino

De esa escucha compartida, luego del trabajo en grupos y del plenario, surgieron las prioridades de la Asamblea Nacional que las agrupamos en estas áreas:

1. Guías de comunidades

2. Vida y cuidado intercomunitario

3. Rincón de todos

4. Vida espiritual y formación

5. Comunicación

Cada una de estas prioridades encierra intuiciones y llamados. No son conclusiones cerradas, sino senderos abiertos que nos invitan a seguir discerniendo en comunidad, con humildad y esperanza. El proceso continúa ahora en nuestras comunidades pequeñas y equipos apostólicos, donde cada delegada y delegado llevará el eco de lo vivido, para seguir buscando juntos los caminos del Señor.

A echar las redes… siempre juntos

Que el Señor nos encuentre reunidos y disponibles, aun en el cansancio o el desaliento. Que sepamos reconocerlo en la orilla, esperándonos con el fuego encendido y que, escuchando su voz, nos animemos una vez más a tirar las redes allí donde Él nos diga.

GFG